Obra:
Luis Fernanda.
Compositor:
Moreno Torroba.
Representación: 25
de abril de 2014.
Lugar:
Universidad de Medellín (20:00 horas).
Compañía:
Fundación Prolírica de Antioquia.
Orquesta:
Orquesta Filarmónica de Medellín.
Director:
Eduardo Díaz.
Solistas:
Gisela Zivic (Luisa Fernanda). Antonio Torres (Vidal). Juan Antonio de Don Pablo (Javier). Natalia Trejos (Carolina).
Para cualquier persona (en
especial los músicos) que guste de la música clásica la Temporada de Ópera y
Zarzuela de su ciudad siempre un motivo de alegría, especialmente si la
fundación Prolírica está de aniversario. De mi memoria puedo recordar las
últimas cinco temporadas con gratos recuerdos. Rigoletto, Traviata, Lucia, La
del soto del parral, Carmen, Un ballo in Maschera, La leyenda del Beso hacen
parte de mis anales como escucha de la compañía.
El pasado viernes, presto
entonces a seguir sumando una obra más en la lista, se representó Luisa
Fernanda en el teatro de la Universidad de Medellín. En palabras para el
escucha: Soberbio. Que magnifica resonancia, para la orquesta y las voces; muy
superior entre otras al Teatro Pablo Tobón Uribe y al mismo Metropolitano José
Gutiérrez Gómez. La logística interna fue increíble, la atención de los
acomodadores y los patrocinadores a carta cabal para los presentes; la falla en
este punto fue sin duda salir del teatro y de la Universidad, un caos completo
gracias al cobro del parqueadero.
Teatro U de M. |
Ahora bien, pasando al
espectáculo, que a pesar de los normales quince minutos de retraso (20:15) dio
la bienvenida al director Eduardo Díaz; cubano y ya conocido por dirigir Carmen
de George Bizet el año anterior; como siempre su aspecto ligero y profundo en
la dirección, sin batuta y atinado en las notas. Un manejo y respeto a la
partitura de buen calibre, con atinadas entradas y un carisma que solo podría
superar la maestra Cecilia Espinoza cuando a mi suerte puso a repicar un teatro
completo con “al fin de la faena busco a mi mozo” un par de años atrás. Además
de ello, el maestro Díaz tiene una virtud extra; su juventud, siempre que sale
caminando por el fondo hasta su atril se puede escuchar esa reacción en
conjunto: “Esta muy jovencito” Tanto así que mis acompañantes no negaron ese
elogio. Su poder en la dirección y el aire “fresco” que menciono atrás, fue
recogido por la periodista Cubana Yuris Norido quien en prólogo a entrevista
con el maestro menciono:
“Díaz es, con
toda seguridad, el más joven de los directores de agrupaciones nacionales. Su
nombramiento parece simbólico. La ópera y la zarzuela necesitan una renovación
en Cuba, al menos desde el punto de vista escénico.”
Eduardo Díaz |
La obra de Torroba, fuerte y
patriota, se acomodó de buena manera con los actores, en primera medida una
Gisela Zivic que no guardo su dramatismo tal como lo hizo con Micaela el año
anterior en Carmen.
Un Don Pablo (Mi favorito,
debido a mi debilidad por los tenores que no desafinan y que además ya había
observado haciendo el Duque en Rigoletto, donde brilló también con una gran “La
donna é mobile” en el 2008) déspota en el carácter, arrepentido al final; pero siempre
conservando una voz entre ligera y dramática.
No menos importante y dado
al reconocimiento del público, el show lo atrapó Antonio Torres con su papel de
Vidal, un actor estupendo con un poder dramático capaz de conmover las fibras
de los presentes, en especial en el final: “Sin mi morena…” Él reconocido
barítono español, hizo brillar su experiencia en el mundo de lírica y que le
dio calificativos como el brindado por Andrés Moreno Mengibar en el Diario
Sevilla:
“Cantó con empaque y contundencia Antonio Torres”
Algo
que le ha convertido no solo en una estrella para considerar a futuro por la
prolírica sino para acreditar su fama como uno de los favoritos para el Teatro
de la Zarzuela de Madrid.
Natalia
Trejos en su papel como la duquesa Carolina fue bien recibido por los
presentes, su dúo de la flor o sus fragmentos en la mazurca de las sombrillas
demostraron su potencia vocal como soprano y demostró que en Colombia el
talento lírico aún existe.
De
destacar en los demás papeles el de Sofía Salazar, la ya mítica mezzosoprano
Colombiana que ejecuto una Ulrica magistral (a pesar de la caída de la bola de
cristal en el inicio del acto) para un Ballo in Maschera de Verdi en el año
2011. Su papel como Mariana demostró su versatilidad y su experiencia para
“enganchar” a los espectadores durante las casi tres horas que llevo el evento.
AntonioTorres y Sofia Salazar (CI), Mazurca de las sombrillas (CII), Gisela Zivic (CIII), |
La
orquesta filarmónica de Medellín también hizo de las suyas con una muy buena
mezcla de juventud y experiencia en los vientos, la madera y la percusión.
Si
tocase hablar de algún aspecto negativo, solo tendría que señalar dos: Un
desliz en la escena: “La subasta” y otro durante el baile del coro de los
vareadores donde una bailarina perdió el ritmo momentáneamente. Sin embargo
ceñirse a ello para criticar una obra sería como dicen los argentinos:
“Buscarle el pelo al huevo”.
Un
aspecto más y el más doloroso en mi consideración, fue la falta de público; un
tercio del teatro lleno, que si bien se pudo reconocer una diversidad de
rostros jóvenes. Puede indicar que es hora de un cambio, no tanto en el fondo
sino en la forma de promocionar el evento.
Por
ahora es de esperar que la temporada termine con llenos totales en María la O y
en la leyenda del beso cuyos espectáculos sé que estarán a la altura del
presentado el pasado viernes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
La opinion es libre, no presiones, no censuras y si agradecimientos. Tu comentario es valioso (xD) para nosotros: